Gózate y agradece a Jesús

Sé libre. Precisamente Él se entregó a la muerte para que tú seas feliz y vivas una vida victoriosa.

«Pues Dios amó tanto al mundo, que dio a su Hijo Único, para que todo aquel que cree en Él no muera, sino que tenga vida eterna». Juan 3:16 

Jesús ya sufrió lo que a ti te tocaba, es mejor que aceptes su sacrificio y vive para Él. 

La mejor manera de recordar la cruz es tener un corazón agradecido y dispuesto a reconocer que tus pecados han sido perdonados y alejarte de ellos.

Cambia tu manera de vivir, Él murió para darte salvación y vida eterna. No dejes pasar tan grande oportunidad de ser feliz.

«Así que, si Cristo murió por nosotros, ya no debemos vivir más para nosotros mismos, sino para Cristo, que murió y resucitó para darnos vida». 2 Corintios 5:15

Dale gracias y celebra por lo que Él hizo por ti.