Eres una mujer muy especial

Amiga preciosa, Dios dice en su Palabra que eres una mujer muy especial. No lo dice con esas palabras exactas, pero eso es lo que se entiende en la siguiente escritura:

«Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las obras maravillosas de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable». 1 Pedro 2:9

No podemos vivir con un sentimiento de insignificancia o infelicidad, porque somos escogidas, llamadas y pertenecemos a Dios.

Necesitamos creer, aceptar y vivir en las verdades que están establecidas en la Biblia para nosotras.

Dios dice cosas hermosas de nosotras y de eso quiero hablarte, porque en el versículo que hoy encontramos 5 argumentos para sentirnos muy especiales para Dios y con nosotras mismas.

Tú eres una mujer muy especial

Estas son cinco rasgos donde Dios te muestra que eres una mujer muy especial:

1.- Eres linaje escogido. Significa que perteneces ahora a una familia ilustre, la más pura nobleza y la más distinguida de todas las familias: la familia de Dios.

2.- Eres real sacerdocio. Tienes una asignación para presentarte delante del Rey, sirviéndole igual como lo hacían los sacerdotes en el pasado. Sólo ellos podían ir a la presencia de Dios, pero ahora tú y yo tenemos ese privilegio también.

3.- Eres nación santa. Dios te salvó, te restauró y te separó de todo lo que te hace daño. Eres santa porque estás apartada para Él, protegida para que el mal no te llegue.

4.- Eres pueblo adquirido por Dios. Él te compró con la sangre de su amado Hijo Jesucristo. Le perteneces y eres su posesión más preciada. Imagínate lo valiosa que eres para el Señor.

5.- Te sacó de las tinieblas. Te sacó de la confusión, del temor, de la depresión, de la vergüenza, de la soledad y del rechazo. Te ha traído a su reino de luz y te ha llenado de amor, gozo, paz. 

Ahora lo que sigue es que demos testimonio de todas las cosas maravillosas que Dios ha hecho a favor de nosotras. Que mostremos a otros su bondad, su amor y todo lo que Él es.

Es necesario que creas que eres una mujer especial, para que puedas disfrutar de la vida nueva y maravillosa que Dios te ofrece. Elige tener fe, porque «sin fe es imposible agradar a Dios» (Hebreos 11:6).

Vivamos en las verdades que el Señor dice acerca de nosotras, no aceptemos menos de lo que Él nos ofrece.

Conclusión

Querida amiga, Dios nos ha elegido porque para Él somos valiosas e importantes. Él ha planeado un futuro de bienestar y libertad. Nos ha concedido el honor de colaborar con Él en su reino, como sus hijas.

Dios nos hace participantes de su gloria, de sus proyectos divinos, de su gracia. También nos transforma, pule y nos capacita para sus propósitos. Todo lo hace el Señor, tú y yo solamente tenemos que creer y decirle: «Sí Señor, acepto y gracias por elegirme».

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Que Dios siga guardándote para sus propósitos, tu amiga,

Lidia E. Cames

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