En las buenas y en las malas

Con Dios siempre estarás segura “en las buenas y en las malas”… O como dice el otro dicho: “en las duras y en las maduras”.

En toda la Biblia tú puedes encontrar promesas para bendecirte, para ayudarte en los momentos de celebración…

También hay promesas para fortalecerte y sostenerte en pie en los momentos de lucha y tribulación.

Por ejemplo:

«Pero Dios es el que me ayuda; el Señor es el que sostiene mi alma». Salmo 54:4

«Mi ayuda vendrá del Señor, creador del cielo y de la tierra». Salmo 121:2

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Dios está contigo en las buenas y en las malas

Si ahora estás en una temporada de bendición, toma esta Palabra de Dios para que no se te olvide que es Él quien en su bondad y misericordia, te ha ayudado.

Es muy bueno darle al Señor todo el mérito que se merece. Así que agradécele su generosidad para contigo. Nada tendrías si no fuera por su gracia y su amor.

Podrías decirle ahora mismo:

“Gracias, Señor, porque todo lo que soy y lo que tengo es por tu abundante gracia para conmigo”.

En consecuencia, te llenarás de fortaleza para los tiempos de dificultad (porque seguramente llegarán mi amiga).

Pero si tu situación ahora es de prueba y adversidad, también aférrate a esta verdad: Dios es quien te socorre y te sostiene.

Él te sostendrá con su poderosa mano y seguramente saldrás victoriosa de este tiempo de angustia.

En las circunstancias duras de tu vida diaria tienes una esperanza: Dios es el que te mantiene de pie. No te desanimes porque tienes al mejor y más eficaz ayudador.

Cuando sientes que no te quedan fuerzas, levanta tu mirada al cielo y dile al Señor:

«Padre celestial, tú eres el que me mantienes con vida, mi futuro está en tus manos».

Él es tu apoyo, tu Roca, ten la seguridad de que nunca te dejará en el suelo. Dios te levanta y acude a socorrerte cuando parece que todo está perdido. Aférrate a su amor y misericordia.

El Señor nunca te soltará… en Él estás segura.

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Que Dios fortalezca tu espíritu, tu amiga,

Lidia E. Cames

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