Dirígeme Señor

Querida amiga, sé que hay momentos en los que no sabes qué camino tomar. Te sientes confundida, con miedo de equivocarte, y quizá cansada de intentar hacerlo todo sola. Es justo en esos instantes cuando más necesitamos elevar una oración sincera: “dirígeme Señor”. Solo Él puede mostrarnos la senda correcta y darnos la seguridad de que no andamos perdidas.

Oración para pedir dirección

La Palabra de Dios nos recuerda esta promesa tan poderosa:

«Muéstrame la senda correcta, oh Señor; señálame el camino que debo seguir. Guíame con tu verdad y enséñame, porque tú eres el Dios que me salva. Todo el día pongo en ti mi esperanza». Salmo 25:4-5 NTV

Cuando hacemos esta oración, evitamos decisiones apresuradas y fracasos innecesarios. Es un acto de confianza que nos asegura permanecer en la voluntad de Dios, el lugar más seguro y lleno de propósito para nuestra vida.

Dirígeme Señor para no perderme

Decirle a Dios “dirígeme Señor” es reconocer que no siempre sabemos qué hacer, pero que confiamos en que Él sí lo sabe. Si lo buscas, no habrá forma de perderte, porque el Señor es un guía fiel que nunca se equivoca. Pon tu atención en Él, deja de lado la ansiedad, y verás cómo abre delante de ti un camino lleno de paz.

Una idea refrescante que quiero regalarte hoy es esta: cada decisión, por pequeña que parezca, puede ser una oportunidad para invitar a Dios a participar en tu vida. Desde elegir palabras amables al hablar, hasta tomar decisiones importantes sobre tu hogar o tu familia, siempre puedes levantar una oración silenciosa: “Señor, ilumina mi mente, dirígeme, quiero agradarte en lo que haga”.

Una oración de confianza

¿Oramos juntas?

“Mi Dios, te pido sabiduría para las decisiones que tendré que tomar en este día. Que pueda distinguir tu voz entre tantas voces y no dejarme confundir por mis propios deseos.
Dirígeme Señor hacia donde tú quieres que vaya, porque tu voluntad es buena y siempre me bendice a mí y a mi familia. En el nombre de Jesús, amén.”

Caminar con confianza

Amiga, no dejes que el temor te paralice. Abre tus oídos espirituales, confía en que Dios hablará a tu corazón y te mostrará lo mejor. Cuando confías en Él, tus pasos se vuelven firmes y seguros. Y aunque no tengas todas las respuestas ahora mismo, recuerda: si Dios va delante, jamás te perderás.

También te gustará leer: Dios te da dirección exacta y segura

Amiga querida si te gustó este mensaje, compártelo en tus redes sociales con los botones en color rosa que están al final del post, y deja un comentario. Si deseas recibir los mensajes nuevos en tu correo, suscríbete aquí a nuestro blog:

Que el Señor sea la luz de tu camino, tu amiga,

Lidia E. Cames

Síguenos en Instagram: @arcoirisdepromesas