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El consejo que Dios nos da hoy es: Vigila tus pensamientos. Con esto me doy cuenta que es posible controlar los pensamientos, porque si no fuera así Dios no lo mandaría en su Palabra.
Yo crecí y viví la mayor parte de mi vida creyendo que los pensamientos en la mente no se pueden controlar.
Qué difícil es esto, porque hay pensamientos que realmente atormentan tu vida, ¿no?
Pero gracias a Dios por su Palabra revelada a través del Espíritu Santo que me abrió los ojos y ahora sé LA VERDAD.
Esto es lo que dice la Biblia:
«Piensen en todo lo que es verdadero, noble, correcto, puro, hermoso y admirable. También piensen en lo que tiene alguna virtud, en lo que es digno de reconocimiento. Mantengan su mente ocupada en eso». Filipenses 4:8 PDT
Si Dios dice que lo hagamos, significa que sí podemos hacerlo.
Tú y yo podemos decidir la clase de pensamientos que permitimos en la mente. Precisamente ahí empieza el éxito o el fracaso en lo que hagas.
Lo que piensas acerca de ti determina tu actitud hacia la vida. Y lo que piensas acerca de los demás determina tu actitud hacia las personas.
Por otro lado, todo lo que pienses acerca de las circunstancias determinará el estado de ánimo en tu corazón.
Vigila tus pensamientos siempre
Empéñate en vigilar los pensamientos que entran en tu mente, porque el enemigo de tu alma te lanza dardos de fuego para confundirte.
Por supuesto que Satanás no quiere que tus pensamientos se dirijan a lo hermoso que Dios tiene para ti y trata de evitar que tu mente se llene de los pensamientos de Dios.
Entonces, lo que hace es enviarte esos dardos de fuego que dice la Biblia en Efesios 6:16. Quiere entretenerte con sus mentiras, provocar temor en tu corazón y apartarte de las verdades de Dios.
Así que, necesitas meditar en la grandeza y santidad de Dios, en sus hermosas y fieles promesas, piensa en las cosas buenas, en lo positivo de las personas en lugar de lo negativo.
Esto es algo que se tiene que practicar de manera intencional. Vigila tus pensamientos esforzándote en recordar lo que Dios dice en su Palabra en vez de darle lugar a lo negativo.
En vez de pensar en lo mal que te está yendo, piensa en lo bueno que tienes. Entonces verás cómo Dios empieza a hacer realidad todas las promesas de paz para tu vida y tu familia.
Seguro te gustará leer: «La paz de Dios en tus pensamientos«.
Sin duda, es importante también lo que declaras con tu boca. A mí me ha funcionado expresar con palabras todos los pensamientos que me dirigen a Dios y a su Palabra.
Pruébalo y no te desanimes porque esto es un proceso de aprendizaje que puede llevar tiempo.
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Que Dios ponga paz en tu mente y tu corazón, tu amiga,
Lidia E. Cames
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