Lámpara a mis pies

¿Puedes decir: La Palabra de Dios es una lámpara a mis pies? El salmista compara a la Biblia con una lámpara, es decir, una luz que va alumbrando el camino correcto y avanzar por él, para llegar al lugar que queremos ir.

«Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino». Salmo 119:105

Cuando alumbramos nuestro camino con una linterna en medio de la noche, nos deja ver el mejor lugar para andar: donde no hay lodo, donde no hay espinas, donde no hay ningún estorbo… para evitar esos obstáculos. 

Sería muy extraño que alumbrando el camino, vayamos en medio del monte o por entre los pantanos, ¿no?

Esto es lo que sucede cuando leemos la Biblia y no hacemos lo que nos dice, cuando sabemos la voluntad de Dios para nosotros y decidimos hacer lo que nos parece mejor.

¿Por qué es la Biblia una lámpara a mis pies?

Porque la Palabra de Dios está a nuestra disposición para que nos sirva de dirección… nos ayuda a tomar decisiones.

Cuando tomas decisiones que van de acuerdo a lo que dice Dios en su palabra, ten la seguridad que no te equivocarás… no vas a errar el camino, porque la Palabra de Dios es luz en medio de la oscuridad. 

Te aseguro que aunque lo que te indique te parezca que va en contra de tu lógica, tus costumbres o tradiciones… irás por el camino correcto, porque nuestros pensamientos no son como los pensamientos de Dios…

«Mis pensamientos no se parecen en nada a sus pensamientos —dice el SEÑOR—. Y mis caminos están muy por encima de lo que pudieran imaginarse». Isaías 55:8

No te vas a tropezar cuando te dejas guiar por lo que dice la Palabra de Dios. Porque ahí vas a encontrar respuestas para conducirte en tu vida personal, en tu familia, en tu trabajo, en tus relaciones, en tus finanzas. Si sigues los consejos del Señor, llegarás a buen destino.

Así que hoy puedes decir: «Mi Dios, decido que tu Palabra sea como una lámpara a mis pies». 

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Léela, créela, estúdiala, medítala, declárala, sigue las instrucciones, aplícala a tu andar diario… Transformará tu vida, tu entorno, tus circunstancias y todo aquello que parece que no tiene arreglo.

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Que tu vida sea llena de la luz de la Palabra de Dios, tu amiga y hermana,

Lidia E. Cames

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