
Alabar a Dios en todo momento transforma tu corazón
16 julio, 2025
Promesas de bendición que también son para ti
27 julio, 2025Cuando todo parece desmoronarse, cuando el dolor nubla nuestras emociones y el futuro se vuelve incierto, necesitamos recordar que en Dios siempre hay un final con propósito. Nada de lo que atraviesas es en vano. Aunque hoy no entiendas, Él está trabajando en los detalles, con amor, para llevarte justo donde debes estar.
Este versículo nos ayudará a comprender:
«Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que Él tiene para ellos». Romanos 8:28 NTV
No es un camino de rosas, pero sí de crecimiento
A veces interpretamos este pasaje como una promesa de comodidad. Pensamos que si amamos a Dios, todo será color de rosa. Pero no es así. Esta promesa es una motivación para los días en que sentimos que todo está mal. Y es ahí donde debemos recordar que hay un final con propósito, que no se trata de que se cumplan nuestros deseos, sino los planes eternos de Dios.

El problema es que muchas veces esperamos que las cosas se acomoden a nuestra manera. Nos frustramos cuando no sucede así, y eso nos impide ver los regalos escondidos tras las pruebas: crecimiento, firmeza, madurez y una fe fortalecida.
Un final con propósito detrás de cada proceso
Romanos 8:28 tiene una frase que a veces pasamos por alto: «según el propósito que Él tiene para ellos». No se trata solo de que las cosas salgan bien, sino de que salgan bien según Dios. Él ve más allá. Tiene en mente un propósito que tú tal vez aún no comprendes, pero que es perfecto para ti.
Dios está más interesado en tu transformación que en tu comodidad. Tal vez quiere enseñarte paciencia, profundizar tu amor, o ayudarte a depender totalmente de Él. Y lo hace usando los momentos más difíciles, porque ahí es donde realmente se moldea nuestro carácter y se revela nuestra fe.

Espera lo mejor, aunque no sea lo que esperabas
Lo que hoy parece una pérdida, mañana puede ser una bendición. Lo que ahora te duele, mañana será tu testimonio. Confía en que hay un final con propósito, que llegará en el momento justo, con lo que realmente necesitas para cumplir el llamado de tu vida.
Rinde tus anhelos. Descansa en sus planes. Y aunque hoy no entiendas, mantén la esperanza: Dios sabe exactamente lo que hace.
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🕊️ Oración final
Señor, gracias por recordarme que todo lo que vivo tiene sentido en tus manos. Aunque hoy no vea el propósito, confío en que estás obrando para bien. Ayúdame a soltar mi deseo y abrazar tu voluntad. Llévame a ese final con propósito que has preparado para mí. Amén.
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Lidia E. Cames
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