Ester una reina con propósito. Segunda parte

Esta es la segunda parte de la historia de Ester una reina con propósito. Anteriormente ya te compartí el relato de cómo esta bella mujer llegó al trono de Persia. Seguro que te agradará mucho leer: Ester, una hermosa y valiente reina. Primera parte

Desde el momento que ella fue coronada reina, empezó a mostrar su capacidad de liderazgo, su sabiduría y valentía en diversas situaciones problemáticas en que se vio involucrada. El tema de hoy tiene su fundamento bíblica en el libro de Ester desde el capítulo 4 en adelante.

Para empezar, recordemos que la reina Ester no declaró nunca que ella era judía, por instrucciones de su primo Mardoqueo. Además el pueblo judío estaba cautivo en Persia.

Dice la historia bíblica que un súbdito de confianza del rey Asuero, llamado Amán, odiaba a los judíos. Entonces, elaboró un plan para exterminarlos y Mardoqueo lo descubrió, quien acudió inmediatamente a Ester para que interviniera a favor de su pueblo.

Enseguida, la reina elaboró un plan, se puso en acción arriesgando su vida y con la ayuda de Dios salvó a los judíos del exterminio. Aunque no se menciona el nombre de Dios, sabemos que Él fue el que libró a su pueblo.

Aprendamos de Ester una reina con propósito

En la siguiente reseña te señalo algunos puntos fuertes del carácter de Esther, que también serán de inspiración y ejemplo para todas las mujeres cristianas.

1.- ACEPTÓ SU PROPÓSITO:

Cuando Mardoqueo le informa a Ester los planes del malvado Amán contra los judíos, ella le argumentó que no podía ir al rey sin que la llamara, porque corría el riesgo de perder la vida. Pero su primo le hizo una observación:

«No creas que vas a ser la única judía que se va a salvar sólo porque vives en el palacio del rey. Si te quedas callada ahora, la ayuda y la liberación para los judíos vendrán de otro lugar, pero tú y la familia de tu padre morirán. Y quién sabe, quizá tú fuiste designada como reina para un momento como este». Esther 4:13-14 PDT

En ese momento, ella comprendió que su vida y la posición que ahora tenía, no eran una simple coincidencia, sino que Dios la había incluido en el plan de liberación para su pueblo.

2.- DEPENDENCIA DE DIOS:

Lo primero que vino a su mente, fue pedir ayuda a Dios. Convocó a todo el pueblo a que se unieran a ella en un ayuno para que Dios les ayudara (v. 15-16). Ella sabía que solamente Él podría respaldarla y guardar su vida cuando se presentara ante el rey.

3.- VALENTÍA:

Cuando Ester estuvo consciente del propósito de Dios en su vida, se llenó de valor. Tomó la decisión de ir ante el rey confiando que el Señor le daría gracia para tener la atención de Asuero. Su fe en Dios fue lo que le dió valentía y determinación cuando dijo:

«Sé que esto va en contra de la ley pero de cualquier forma lo haré. ¡Si he de morir, que muera!». Ester 4:16b PDT

4.- SABIDURÍA:

(Ester 5:1-8) Ella no entró gritando y acusando a Amán, mucho menos haciendo un gran escándalo. Con toda la prudencia se vistió con sus ropas reales y al estar frente al rey, él le extendió su cetro de mando como señal de aceptación y le dijo que lo que ella le pidiera se lo concedería.

No le dio a conocer ahí frente a todos la razón de su visita, sino que lo invitó a un banquete junto con Amán. Aún ahí no le dijo nada, sino que los invitó a un segundo banquete y ahí le expuso el malévolo plan de Amán. Puedes leer los detalles en el capítulo 8 del libro de Ester.

5.- COMPASIÓN:

Ester también mostró una gran compasión y preocupación por los demás. En el libro de Ester, se ve cómo ella arriesgó su propia vida al interceder ante el rey en nombre de su pueblo. Ester sabía que, como reina, tenía la responsabilidad de proteger y velar por su pueblo, incluso si eso significaba perder su propia vida.

DESENLACE

Por supuesto que el rey Asuero tomó las medidas pertinentes para castigar al culpable de esta conspiración contra el pueblo judío. Y a la reina Ester le dio todas las facilidades para organizar un contraataque para que su gente pudiera defenderse, obteniendo una gran victoria.

Celebraron alegremente con una fiesta que llamaron Purim, quedando establecida desde ese día como celebración especial cada año, para recordar esta gran liberación.

La historia de Ester una reina con propósito nos inspira para que en los momentos de crisis seamos capaces de seguir el ejemplo de Ester. Aceptemos que cualquier circunstancia difícil que se nos presente, forma parte del propósito que Dios tiene para nuestra vida y la enfrentemos siempre de la mano de Dios, dependiendo totalmente de su amor y poder.

Que Dios nos dé la sabiduría y prudencia para tomar decisiones, además de un corazón compasivo y dispuesto siempre para ayudar a los demás, comenzando con nuestra familia y los más cercanos.

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Que Dios te fortalezca y cumpla su propósito en tu vida, tu amiga,

Lidia E. Cames

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