El Dios de los milagros

¡Hola amiga cazadora! Hoy vengo a recordarte que tenemos un Dios que opera sobrenaturalmente en nuestra vida y nuestras circunstancias. Dejemos que Él sea el Dios de los milagros.

No importa cuán dura sea la batalla que enfrentamos. Lo que debe ser importante es que sepamos que nuestro Dios hace milagros y maravillas.

Lo dice claramente la Biblia en este versículo: 

«Tú eres el Dios que hace milagros; mostraste tu poder entre las naciones». Salmo 77:14 PDT

Te animo a tener una actitud expectante acerca de lo que el Señor hará en esa situación difícil que enfrentas.

Así que en este día confiemos en esta verdad y vamos a proclamarla con toda la fe de nuestro corazón.

Tenemos que saber que es inevitable sentir temor, ansiedad o preocupación cuando vemos lo que nos rodea.

Creamos en el Dios de los milagros

Hoy yo te animo a que encima de todo lo que puedas sentir, siempre prevalezca tu fe en el único Dios que hace milagros sorprendentes.

Cuando la duda te esté robando la fe puedes hacer dos cosas:

— Confesar la Palabra de Dios. El versículo de hoy es ideal para afirmar tu fe en quién es Él y lo que es capaz de hacer a tu favor.

— Recuerda cada milagro del pasado. Te hará bien tener en mente todas las hazañas que hizo Dios a favor de su pueblo desde la antigüedad. Por ejemplo:

1.- Abrió el mar para librarlos de los egipcios cuando Moisés los guiaba hacia la tierra prometida (Éxodo 14).

2.- Detuvo el sol para darle tiempo al ejército de Josué que ganara la batalla contra el ejército de los amorreos (Josué 10).

3.- Envió fuego para quemar la ofrenda del profeta Elías y glorificarse frente a los profetas de Baal (1 Reyes 18).

4.- Levantó a Lázaro después de haber estado muerto cuatro días, trayéndolo a la vida delante de los fariseos que lo criticaban (Juan 11).

5.- Multiplicó cinco panes y dos peces para que comieran más de cinco mil personas en el desierto (Mateo 14:13-21).

Hermosa cazadora, ese mismo Dios es el que ahora adoramos y Él es capaz de hacer el milagro que tú y yo necesitamos en este tiempo. Todavía hoy nos sorprende con su poder.

Conclusión

Amada cazadora, en lo duro de la prueba ten presente esta verdad infalible de la Palabra de Dios. Seguro que verás tu milagro, porque Él es maravilloso y sobrenatural

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En todo tiempo tenemos que estar preparadas para hacer esta poderosa oración: 

«Señor, descanso en ti, porque yo sé que tú eres el Dios de los milagros y maravillas para mi vida. Yo te creo y veré tu mano de poder a mi favor, sé que te harás cargo de todo en este día. Gracias mi Dios. En el nombre de Jesús”.

Confía en Él y no serás defraudada, Él tiene el poder y quiere ser tu Ayudador.

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Que tengas un día de victoria, un abrazo,

Lidia E. Cames

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