Vive el amor de Dios cada día
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Libre de angustia
27 enero, 2015
Amar como Dios nos ama es un reto para todo creyente, porque Dios nos ama, aun con los errores que cometemos. Es un amor incondicional.
¿Podremos hacer lo mismo nosotras?
Jesús nos dejó la unidad de medida para el amor. Él nos deja una indicación acerca de la manera en que nosotros debemos amar a los demás:
«Éste es mi mandamiento: Ámense unos a otros de la misma manera en que yo los he amado». Juan 15:12 NTV
Él nos amó aunque nosotros no le amáramos. Entregó su vida, se sacrificó para que tuviéramos salvación.
¿Podríamos amar de la misma manera?
Amar como Dios nos ama
Esto no se da en nosotros de manera natural, porque nuestra naturaleza carnal y egoísta no lo permite.
Sino que es algo que necesitamos pedirlo a Dios en oración.
Oramos:
«Mi Dios, te doy gracias por amarme a pesar de lo que soy, tu amor incondicional me limpia, me libera, me hace vivir con paz y con alegría. Me has amado tanto que derramaste tu sangre y diste tu vida por mí.
Ahora, Señor, yo quiero obedecer tu mandamiento de amar a los demás como tú me has amado. Ayúdame a recibir y entender tu amor, a experimentarlo siempre en mi corazón para que yo pueda extenderlo a los que me rodean.
Te pido que me capacites para amar aunque me ofendan, sostenme en medio del rechazo, fortaléceme en mis debilidades.
No permitas que me canse de intentar amar a mi prójimo, Señor. Te pido que tu amor me ayude a tolerar lo intolerable, a perdonar lo imperdonable y a amar a pesar de que no me amen a mí.
Ayúdame para que cuando yo ame de esa manera, el mundo pueda verte a ti y tu nombre sea glorificado. Que tu amor sea mi fuerza, mi motor y mi dirección. En el nombre de Jesús.»
Querida amiga, vamos a esforzarnos para amar como Dios nos ama, pidamos a Dios que nos ayude a tener un corazón como el suyo a partir de ahora.
También te ayudará leer: El amor de Dios es para ti siempre
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Que Dios bendiga tu vida abundantemente, tu amiga,
Lidia E. Cames
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