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En la Biblia encontramos diversas historias en las que las que los protagonistas son bebés. Hoy te comparto: Bebés célebres de la Biblia.
Algunos han sido anunciados por Dios a través de ángeles o por medio de sueños, siempre encaminados a cumplir los propósitos de Dios.
Otros de estos pequeños fueron la respuesta a las oraciones de madres estériles que sufrían por esa situación.
Unos más, son populares únicamente por la forma en que Dios permitió que llegaran a cumplir el llamado divino para su obra.
Quizá pienses que este mensaje sólo es informativo. Pero ¿sabes?
Yo siento que los padres de esos bebés eran igual que nosotras amiga, y Dios siempre los escogió para cosas muy grandes.
Espero que este mensaje te dé un gran aliento y una esperanza renovada para lo que esperamos de nuestros hijos.
También tenemos grandes promesas para ellos de parte de Dios y veremos cumplido su propósito.
Bueno, pasamos directamente al contenido.
Te menciono cinco bebés célebres de la Biblia a continuación:
Aquí están los bebés célebres de la Biblia:
1.- Moisés (Éxodo 2-3). Nació en tiempos de la esclavitud hebrea en Egipto, cuando Faraón ordenó el asesinato de todos los niños varones de este lugar.
Lo particular de la vida de Moisés fue que su madre lo mantuvo escondido durante tres meses. Cuando ya no pudo ocultarlo más, lo colocó en un canasto para arrojarlo a navegar por el río.
La hija de Faraón lo encontró y decidió hacerse cargo de él. Moisés llegó a ser el líder que liberó al pueblo hebreo del yugo egipcio.
2.- Samuel (1 Samuel 1-3). Ana era una mujer estéril y pidió en oración la llegada de un hijo, diciéndole a Dios que si Él se lo daba, ella se lo entregaría para su servicio.
Al año de haber orado, Ana tuvo finalmente en sus brazos a Samuel. Lo llevó al templo y entregó al sacerdote Elí para que lo educara en el servicio a Dios.
Samuel fue profeta, sacerdote, juez y padre espiritual en el pueblo de Israel durante 40 años.
3.- Isaac (Génesis 12, 15, 17). Fue hijo de Abraham y Sara. Ella era estéril. Este bebé fue prometido por Dios y añorado por sus padres durante 25 años. Finalmente nació cuando Abraham tenía ya 100 años y Sara 90.
Isaac fue el padre de Jacob, de quien nacieron los 12 hijos que dieron lugar a las 12 tribus del pueblo de Israel, el pueblo elegido por Dios.
El precursor del Salvador:
4.- Juan Bautista (Lucas 1-3:1-22). Hijo del sacerdote Zacarías y Elizabet. Ambos eran muy mayores cuando un ángel le anunció a Zacarías que tendría un hijo, quien sería el encargado de preparar el camino para el Mesías.
Cuando Juan Bautista estaba aún en el vientre de su madre, reconoció al Salvador que se gestaba en el vientre de María. Su ministerio se basó en el bautismo para arrepentimiento. Fue él quien bautizó a Jesús.
El mejor:
5.- Jesús (Mateo 1, 2). El niño más anunciado, el más esperado y el más amado por la humanidad en todos los tiempos.
Fue anunciado a María, su madre, a través de un ángel; y concebido por el Espíritu Santo. Él es Dios hecho carne.
No sólo fue el Salvador de Israel, sino el Salvador del mundo. Su ministerio en esta tierra duró tres años y medio, a los 33 años murió crucificado y resucitó al tercer día.
Su sacrificio nos da salvación, su sangre nos limpia de todo pecado y su resurrección nos dará vida eterna.
CONCLUSIÓN:
Amiga cazadora, este estudio bíblico nos da esperanza para nuestros hijos y los hijos de ellos y todas las generaciones que vendrán más adelante. Ellos también tienen un llamado muy especial y para muestra te comparto este versículo:
«Derramaré mi Espíritu sobre tus descendientes y mis bendiciones sobre tus hijos». Isaías 44:3b PDT
Ese bebé que esperas, tu hijo o tu nieto tienen un propósito divino. Tiene un llamado a la celebridad, porque Dios ya lo ha determinado. Asimismo, los hijos que actúan con rebeldía, aquellos que aparentemente se encuentran tan lejos de las promesas que hay para ellos, también tienen un propósito muy especial que Dios cumplirá en sus vidas.
Te toca a ti hacer tu parte para que esto suceda, siguiendo los principios que están en la Palabra de Dios y dirígelo a su destino eterno.
También te ayudará leer: Cómo tratar con hijos adolescentes difíciles
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Que Dios te dé abundantes bendiciones,
Lidia E. Cames
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