Oración para tener contentamiento

Yo necesito hacer diariamente una oración para tener contentamiento. Primero, porque no siempre las cosas van a resultar como yo quiero y no puedo vivir molesta o amargada por eso. Segundo, porque es la voluntad de Dios que yo tenga contentamiento. Debo pedirle a Dios que me ayude porque no es fácil amiga: una cosa es quererlo y otra muy distinta es tenerlo.

Quiero que la voluntad de Dios sea sobre todo, pero también quiero tener paz aceptándola. Porque tener contentamiento se trata de aceptar la voluntad de Dios en nuestra vida y al mismo tiempo estar tranquilas confiando en Él.

Nos conviene aceptar y estar contentas, no es que nos resignemos o conformemos, sino que tenemos paz creyendo que Dios tiene un propósito de bendición para todo lo que nos toca vivir.

Dice la Biblia:

«He aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación». Filipenses 4:11

El apóstol Pablo nos deja ver en este versículo que el contentamiento es algo que se aprende, pero personalmente creo que también necesitamos la ayuda de Dios. Así que es algo por lo que tenemos que orar.

Por eso te comparto aquí una sugerencia de oración:

Oración para tener contentamiento

“Señor, no quiero estar inconforme por las cosas que deseo y no las tengo. Ayúdame a agradecerte cada una de las bendiciones que sí tengo.

No me voy a entretener en lo que mis ojos ven, porque son circunstancias temporales. Pongo mi mirada en las cosas del cielo que son eternas.

Aparto la mirada de mis carencias y las pongo en ti Jesús, quien eres mi Salvador, mi proveedor, mi sustento, mi protección y mi guía. Tú eres el Soberano en mi vida y sabes lo que necesito.

Decido tener contentamiento en medio de la situación que ahora vivo, porque tú estás conmigo, fortaleciendo mi espíritu, mi alma y mi cuerpo. Me niego a permitir que el sufrimiento me aparte de cumplir con tus propósitos.

Hoy elijo aceptar con gozo tu voluntad y declaro que todo lo que suceda alrededor de mí, es porque tú así lo has permitido y en todo eso hay una enseñanza para mí.

Dame la sabiduría para distinguir aquello que tú quieres que aprenda o te entregue para mi propia bendición.

Te pido que aquietes mi alma con tu Espíritu Santo, que mis emociones se tranquilicen por la paz que solamente viene de tu mano. Enséñame a confiar totalmente en ti, porque quiero agradarte.

Rechazo el espíritu de temor y cobardía. Levanto mis manos y recibo tu Espíritu de poder, amor y dominio propio. Ahora me lleno de tu paz y tu gozo, Padre amado.

Gracias por tu cuidado y tu provisión, mi Dios. Agradezco tu amor, tu bondad y tu misericordia. En el nombre de Jesús”.

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Finalmente

Te dejo aquí algunas porciones bíblicas para meditar:

Mateo 6:10; Lucas 1:38; Mateo 26:39; 2 Timoteo 1:7; 1 Timoteo 6:6; Filipenses 4:11-13

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Deseo que Dios te mantenga firme en su voluntad, tu amiga,

Lidia E. Cames

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