Pacto de bendición
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Nos animamos unas a otras
1 febrero, 2015
Yo sé que tú sabes qué es la gracia de Dios: es el regalo de Dios que no merecíamos. Pero ¿sabes tú cómo te beneficia ese regalo?
De eso te hablaré en este mensaje:
El Señor nos ha regalado tanto a través de Jesucristo que la lista sería interminable para enumerar todo lo que tenemos ahora.
En lo personal, me parece que el regalo más impresionante que recibimos es que ahora somos hijas de Dios.
Si tú eres madre, seguramente puedes captar más fácilmente la magnitud de este hecho con respecto a nuestro Padre Dios.
Al ser hijas de Dios tenemos acceso a su corazón a cualquier hora y todas las veces que lo deseemos.
Nuestro Padre ha sido muy generoso con nosotras en esa preciosa gracia, derramándola en abundancia. Lo dice la Biblia:
«Pero la gracia de nuestro Señor se derramó sobre mí con abundancia». 1 Timoteo 1:14 NVI
La gracia de Dios es abundante
Con ella también podemos disfrutar de amor, protección, ayuda, compañía, fortaleza y muchísimo más.
Con la gracia de Dios no hay culpas, tampoco hay cargas pesadas.
Hoy cuentas con esa gracia infinita que está disponible para todo el que cree, porque Dios la derrama todos de manera generosa.
La gracia de Dios ha sido depositada en ti por medio de Jesucristo para que puedas acudir a su trono con toda libertad.
Mira aquí más bendiciones del amor de Dios:
>> hallas perdón…
>> puedes otorgar perdón a los que te ofenden…
>> también con su gracia se abren las puertas de oportunidad…
>> puedes vencer toda tentación…
>> sabes administrar tus finanzas…
>> y con su gracia tienes relaciones humanas de excelencia…
Así que por la gracia de Dios puedes ser todo lo que Dios quiere que seas. Toma esa gracia divina que hoy se extiende hacia ti y vive un día de victoria en Cristo Jesús.
Elige hoy creer esta gran verdad: Nuestro Señor derramó abundantemente su amor y bondad sobre ti.
Te ayudará leer: No me siento digna de Dios
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Que Dios siga llenándote de sus regalos para tu vida, tu amiga,
Lidia E. Cames
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