Fuerza como la del búfalo. Una promesa divina

Dicen que el búfalo se sacude cuando siente que está en peligro. No es que tenga un aceite mágico en la piel, pero lo que sí tiene es una fuerza interior que lo hace resistir. Cuando los leones lo rodean, no huye ni se acobarda. Al contrario, se mantiene firme, alerta, y muchas veces su manada acude en su defensa. Una fuerza como la del búfalo es la que Dios quiere darte hoy.

Hay momentos en que podríamos sentirnos débiles, agotadas o sin ánimos para seguir, hasta pareciera que las circunstancias nos sobrepasan. Pero la Biblia nos recuerda algo poderoso:

“Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; seré ungido con aceite fresco” (Salmos 92:10).

Mi amiga bella, esta no es una frase bonita, es una promesa de Dios para tu vida.

Ungidas con fuerza como la del búfalo

La fuerza como la del búfalo no se trata solo de resistencia física, sino de una fuerza espiritual, una valentía que viene directamente del Señor. El búfalo es un animal que no se deja vencer fácilmente. Cuando se ve amenazado, se mantiene firme y muchas veces se enfrenta al enemigo con toda su potencia, incluso recibiendo ayuda de su manada.

Tú tampoco tienes que rendirte fácilmente. Dios que seas: valiente, determinada, y confiada en que no estás sola.

A veces nos sentimos como presas del miedo, del desánimo, de los ataques emocionales o espirituales que nos rodean. Pero puedes «sacudirte» con la fe, con la Palabra de Dios, y recordar que no estás sola. La fuerza del búfalo no está en una sustancia que hace su piel resbaladiza, sino en su valentía y resistencia.

Dios puede darte fuerza como la del búfalo en los días en que te sientes débil. Ese “aceite fresco” que menciona el salmista es símbolo de poder espiritual, nuevas fuerzas, nuevas esperanzas y nuevas oportunidades. No importa cuántas veces te hayas caído o cuán agotada estés, el Señor quiere ungirte hoy con una fuerza nueva que no viene de ti, sino de Él.

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Tu debilidad no es el final

Dios no espera que seas fuerte todo el tiempo. Lo que Él quiere es que confíes en Su poder. La fuerza como la del búfalo no es algo que tú fabricas: es algo que Dios derrama sobre ti cuando te rindes en su presencia.

La unción de Dios es lo que marca la diferencia. Cuando estás ungida con su aceite fresco, no importa lo que venga: el temor, la tristeza o la inseguridad no te derriban. Con la fuerza como la del búfalo y la unción del Espíritu Santo, puedes permanecer firme y avanzar.

🙏 Oración:

Señor, renueva mis fuerzas como las del búfalo. No puedo sola, pero confío en ti. Que tu aceite fresco me llene de poder, paz y confianza. Sé tú mi fuerza, porque aunque mis emociones se agoten, yo me aferro a ti. Gracias por darme la fuerza que necesito para cada día. En el nombre de Jesús.

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Que el Señor renueve tus fuerzas hoy y siempre, tu amiga,

Lidia E. Cames

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