El Señor guía tus pasos

Algunas veces puedes sentir inseguridad sobre el camino a seguir. Debes saber que el Señor guía tus pasos, siempre que tú se lo permitas.

De esa forma, no hay margen de error o equivocación.

Necesitamos encontrar la mejor manera de librarnos del pecado y aprender a tomar decisiones que nos acerquen a Dios.

Y no es fácil lograrlo con nuestra sola voluntad, ahí es donde echamos mano de este versículo como una oración sincera:

«Guía mis pasos conforme a tu palabra, para que no me domine el mal». Salmo 119:135 NTV

El Señor guardará tus pasos hoy y los encaminará hacia el bien, por medio de su Palabra que está en tu corazón.

Seguramente el Espíritu Santo te recordará las instrucciones del Señor y todos los pasos que des serán firmes. 

Tus pies no resbalarán porque la Palabra de Dios es tu guía.

Pero ¿cómo puede guiar tu camino la Palabra de Dios?

Es necesario leer la Biblia todos los días, pidiéndole al Espíritu Santo que te ayude a retenerla en tu mente y en tu corazón.

Entonces se integrará a tu ser, pensarás en ella durante el día, donde quiera que vayas, hasta cuando vayas a descansar, te dormirás pensando en ella.

Por eso, en el momento que te sientas tentada a hacer algo indebido, el Espíritu Santo entrará en acción y no te permitirá que te equivoques. Será como si algo dentro de ti se opusiera a hacer lo incorrecto de forma natural.

Desde ahora, el Señor guía tus pasos

Es muy conveniente que nos esforcemos en tener una relación muy cercana con Dios para que podamos entender las indicaciones para cada día.

Por eso, nuestra oración del día de hoy y la de cada mañana al despertarnos debiera ser así: 

“Padre Dios, reconozco que no podré enderezar mi camino por mí misma. Necesito recordar tu Palabra para no resbalar cuando mis pies se debilitan.

Te pido que me ayudes a apartar un tiempo cada día para leer la Biblia con la dirección del Espíritu Santo. También deseo que tu palabra se grabe en mi corazón para transformar mi vida.

Ayúdame a declarar con mi boca tus mandamientos para guardarlos en mi mente, recordarlos y así el pecado no tenga cabida en mi vida. Yo creo que tu Palabra es viva y eficaz… tiene poder para transformarme. Amén”.

Amiga bella, cree que desde hoy el Señor guía tus pasos. Si este mensaje ha tocado tu corazón, por favor compártelo y déjanos un comentario que nos dé la oportunidad de conocerte. Que Dios sea tu guía toda tu vida, tu amiga,

Lidia E. Cames

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