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La paz es un regalo precioso que Dios ha puesto en nuestros corazones desde el momento en que creímos en Jesucristo. Sin embargo, nos ocurren situaciones inesperadas y traumáticas que son difíciles de sobrellevar; entonces es cuando nuestra paz se ve amenazada debido a la inconformidad, también por las frustraciones y aflicciones que todo esto acarrea. Hoy vamos a meditar en 5 principios para cultivar la paz interior en nuestro diario vivir.
La voluntad de Dios es que en todos los aspectos de nuestra existencia siempre permitamos que su paz llene nuestro corazón. Esto es válido tanto para temporadas buenas, como para los tiempos en que no salen las cosas según nuestro gusto. Así lo dice la Biblia:
«Que la paz de Cristo reine en sus vidas». Colosenses 3:15 BLPH
Entonces necesitamos mantener y cultivar esa paz divina en nuestro día a día. Para lograrlo, es importante enfocarnos en ciertos aspectos espirituales. A continuación, se presentan cinco puntos clave para que una mujer cristiana pueda experimentar en todo tiempo la paz que Dios ofrece.
5 principios para cultivar la paz interior
1. En la Comunión con Dios
«Que el mismo Señor de paz les dé su paz en todo momento y en cada situación. El Señor sea con todos ustedes». 2 Tesalonicenses 3:16 NTV
La comunión constante con Dios es básica para mantener la paz en nuestros corazones. Al mantener una relación cercana con Dios buscando su presencia, adorándole y admirando su santidad, seremos llenas de su paz y recibiremos bienestar aún en medio de las dificultades.
2. En la Palabra de Dios
«Los que aman tu Palabra disfrutan de mucha paz y no sufren ningún tropiezo». Salmo 119:165 TLA
La Palabra de Dios es una fuente inagotable de paz. Cuando dedicamos tiempo a leer, estudiar y meditar sus promesas, así como su amor y poder, permitimos que la verdad de Dios se arraigue en nuestros corazones, proporcionándonos paz y estabilidad espiritual.
3. En la Oración
«No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que Él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús». Filipenses 4:6-7 NTV
La oración es un canal poderoso para recibir la paz de Dios. Si presentamos nuestras preocupaciones y agradecimientos a Dios, platicándole todo lo que nos pasa, derramando nuestro corazón de todo lo que sentimos, también podemos experimentar su paz que sobrepasa todo entendimiento.
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4. En los Pensamientos
«Piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza. […] Háganlo así y el Dios de paz estará con ustedes». Filipenses 4:8-9 DHH
Nuestros pensamientos juegan un papel muy importante en nuestra paz interior. Vamos a crear un ambiente mental de paz enfocando nuestra mente hacia lo positivo, lo que suma y bendice nuestras vidas.
5. Confianza en Dios
«Tú guardarás en perfecta paz a todos los que confían en ti, a todos los que concentran en ti sus pensamientos». Isaías 26:3 NTV
La confianza en Dios es definitiva para vivir en paz. La decisión de confiar plenamente en Dios y mantener la mente fija en su fidelidad y amor, nos llevará siempre a experimentar una paz perfecta y constante. Cuando confiamos en Dios estamos eligiendo descansar en Él mientras salimos de las pruebas. Si tenemos la certeza de que el Señor siempre obrará a nuestro favor, el corazón se nos llenará de su preciosa paz.
Conclusión
Siempre que apliquemos estos 5 principios para cultivar la paz interior, provocaremos que la paz de Dios reine en nuestras vidas. Es el mejor camino para disfrutar ese regalo de paz que el Señor ha depositado en nuestros corazones.
Además, es una paz que no solo nos sostiene en momentos de dificultad, sino que se convierte en una forma de vida para todas las hijas de Dios. Así viviremos vidas plenas y abundantes en su presencia.
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Bendiciones abundantes, tu amiga,
Lidia E. Cames
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