Intenciones correctas y corazones nuevos

Hoy quiero platicarte lo que Dios ha hecho en mi vida a través de creer esta promesa de dar intenciones correctas y corazones nuevos. 

«¡Y les daré un corazón nuevo, les daré intenciones nuevas y rectas, y pondré un espíritu nuevo en ustedes! ¡Les quitaré sus corazones de piedra, tercos e insensibles, y les daré nuevos corazones, llenos de amor y buenas intenciones!». Ezequiel 36:26 NBV

Me ayudó a descansar en el Señor cuando no podía hacer lo que a Él le agrada.

Decidí no fijarme en mis errores sino poner mi vista en lo que Él hace en mi corazón.

Y es que esta promesa nos libera de un esfuerzo innecesario, quiero decir, de que en nuestras fuerzas y recursos no podremos cambiar.

Amiga, necesitamos confiar en que Dios nos cambia desde adentro hacia afuera.

Es muy difícil cambiar conductas cuando no le hemos entregado nuestro corazón al Señor para que Él nos forme conforme a su voluntad.

Pidamos intenciones correctas y corazones nuevos

Cuando yo empecé a orar pidiéndole a Dios que tomara mi corazón, le colocara las intenciones correctas y lo cambiara para su propósito, Él empezó a provocar que me gustara lo que a Él le gusta y repudiara lo que Él repudia.

Claro que es un proceso que no terminará mientras viva, pero yo vivo confiando en que el Señor siempre está formando mi carácter conforme al suyo.

Me falta mucho, pero no me estreso. Me equivoco, le fallo a Dios, pero siempre voy a su presencia a pedir y recibir perdón y me levanto para seguir sin culpas.

Estoy segura que habrá alguna cazadora que hoy necesite esta Palabra para ser libre de culpas y remordimientos.

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Amiga, si tú necesitas que Dios haga su obra desde tu interior, dándote las intenciones correctas y de acuerdo a su propósito, te conviene tomar con fe esta promesa.

Empieza a vivir en libertad creyendo que Dios está formando en ti un corazón que le ame y que anhele siempre hacer lo bueno. 

Y recuerda: Vamos paso a paso, no podemos lograrlo todo ni siquiera en toda nuestra vida. Solo seremos perfectas cuando lleguemos a su presencia el día que Él venga. 

Tomemos en cuenta que nuestro Padre trabaja cada día en nuestro corazón nuevo dándonos intenciones correctas y corazones nuevos.

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Disfruta tu vida y sé libre mi amiga linda, un abrazo,

Lidia E. Cames

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