Recompensas para los íntegros

La integridad tiene un premio de parte de Dios, mi amiga. ¡Claro! Él tiene recompensas para los íntegros que son muy especiales y una de ellas es ‘vivir para siempre en la tierra’.

Así lo dice la Biblia:

«Pues los íntegros, los perfectos, habitarán la tierra y permanecerán en ella». Proverbios 2:21 NVI

Necesitamos aclarar dos puntos para poder creer y recibir esta promesa:

Primero:

— ¿Qué significa «vivir para siempre en la tierra»?

El pueblo de Israel vivía en una tierra que Dios les dio como herencia. Se las había prometido desde el patriarca Abraham. Ya estaban establecidos en Canaán, una tierra de bendición.

Sin embargo, había un principio a seguir para conservar la tierra: La integridad.

Aplicando este versículo a nosotras, nuestra tierra son todos los bienes con que Dios nos ha bendecido. No solamente lo material, sino en todas las áreas de nuestra vida.

También entendemos que vivir en la tierra es libertad y bienestar total.

Así que nuestra tierra puede ser: casa, trabajo, prosperidad, salvación, paz, familia, nuestra relación con Dios y todo aquello que recibimos de la mano de Dios.

Entendemos que si somos íntegras, Dios nos permitirá vivir siempre en esa bendición y disfrutando de las promesas que nos ha hecho.

Segundo:

— ¿Qué es la integridad?

Esto es que una persona debe ser honesta, sincera, buena y recta; delante de Dios y de los hombres. La integridad se logra con cada decisión diaria que hacemos en nuestra vida.

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Hay recompensa para los íntegros

Quizá estés pensando igual que yo cuando vi esta promesa: «Pero eso se me hace muy difícil, yo no puedo ser perfecta y no equivocarme nunca».

No se trata de no equivocarse nunca, se trata de tener un corazón siempre dispuesto a hacer el bien y que agrade a Dios.

Además se trata de reconocer delante de Dios cuando fallamos y tener la humildad para pedirle perdón.

Sólo con la dirección del Espíritu Santo podremos aprender la integridad. Dejemos que a través de Jesús nuestra vida pueda ser transformada.

Tú y yo podemos obtener las recompensas para los íntegros, si abrimos nuestro corazón a la obra de Dios en nuestra vida.

Entonces, entendemos que la tierra (bendición) es para todas las hijas de Dios. Pero permanecer en la tierra para siempre es para las mujeres con integridad, es decir, conservar una vida llena de favor y gracia es decisión de cada una de nosotras.

Vale la pena guardarse para el bien, tiene sentido apartarse del mal y de todo lo que es deshonesto y que
desagrada a Dios.

Bendiciones abundantes llegarán a ti y se irán aumentando conforme vayas dando pasos hacia la voluntad de Dios.

Son bendiciones que cubren todas las áreas de tu vida y que están destinadas para ti desde el momento en que dispusiste tu corazón para obedecer a Dios y vivir bajo su protección y dirección.

Conclusión

Personalmente, yo creo que la palabra integridad tiene que ver más con la sinceridad de un corazón que desea hacer el bien.

Si tú has vivido con corazón puro y no has visto tu bendición, no te desanimes ni dejes de hacerlo. Te toca empezar a creer esta promesa y serás sorprendida; porque tu fe es lo que mueve la mano de Dios a tu favor.

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Que la mano de Dios te guíe en todas tus decisiones, tu amiga,

Lidia E. Cames

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