Dios ve el corazón
14 marzo, 2015La alegría es medicina
14 marzo, 2015Este versículo es poderoso cuando lo creemos y lo proclamamos con fe, entonces veremos la total protección y seguridad que Dios nos da aunque pasemos por dificultades.
Puedes estar en la situación con más alto riesgo o estar expuesta a los peligros más horribles. Eso no importa. Pero que tu corazón esté muy confiado en que Dios te enviará a su ángel personal para salvarte.
Así lo dice la Palabra de Dios:
«Pues el ángel del Señor es un guardián; rodea y defiende a todos los que le temen». Salmo 34:7 NTV
Temer al Señor no es tenerle miedo; es honrarlo, reverenciarlo y respetarlo.
Cuando dice «el ángel del Señor», se entiende que es el ángel personal de Dios a tu servicio, pero yo creo que es Dios mismo estando a nuestro lado como siempre lo ha prometido.
Él salvará tu vida de la muerte, protegerá tu reputación del falso testimonio y guardará tu corazón de la tentación.
Esto se hace realidad porque tu fe y confianza está siempre puesta en el Señor, también es importante el respeto que tienes por su nombre. Además le das honra en todo lo que haces.
En Dios hay total protección y seguridad
Sólo porque dependes de Dios es que Él te envía su guardia de seguridad para que tú estés a salvo. Así que esto significa que tu fe firme en Él es lo que hace que el Señor movilice sus ejércitos de ángeles para que te cuiden.
No hay miedo ni inseguridad que te robe la paz, porque el Dios que adoras siempre te protege de todo daño.
Oramos:
“Gracias, Señor, por la vigilancia que has puesto sobre mí las 24 horas de todos los días de mi vida. Vivo en tranquilidad y seguridad porque tú te encargas de alejarme de todos los peligros que pueda enfrentar.
Decido poner mi confianza en tu palabra que me protege. Ayúdame a estar siempre unida a ti, no quiero separarme de tu amor y cuidado. Te amo Dios.”
Seguro que te bendecirá leer: «Promesa de protección divina«.
Es importante que después de orar, procuremos apagar el temor, confesando que en Dios tenemos total protección y seguridad en medio de los peligros.
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Mi oración es para que Dios te guarde siempre, tu amiga,
Lidia E. Cames
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