Cultivemos la paciencia en la prueba
29 marzo, 2015Todo lo puedo en Cristo
29 marzo, 2015(Señor) «Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley». Salmo 119:18
Cuando le decimos al Señor: ‘abre mis ojos’ de acuerdo a este versículo, le estamos pidiendo que nos dé entendimiento y sabiduría para comprender su Palabra.
Que nos ayude a disfrutar cuando ponemos en práctica cada una de sus enseñanzas, porque son verdades maravillosas que nos dan vida.
Este versículo podría ser una gran oración antes de leer la Biblia. Porque solamente podremos tener revelación de lo que leemos a través de Dios Espíritu Santo.
Si leemos y no pedimos que nos sean abiertos los ojos, entonces entenderemos con nuestro propio razonamiento. Necesitamos que la comprensión venga directamente del corazón de Dios para nosotras.
Solo así podremos aplicar los principios de la Palabra a nuestra vida, y en consecuencia, vivir conforme a los deseos de Dios para nosotros.
Señor, abre mis ojos
Dios quiera que desde ahora mismo, nuestra oración sea este versículo bíblico:
«Señor abre mis ojos y hazme ver lo maravillosas que son tus enseñanzas». Salmo 119:18 PDT (Adaptación personal)
«¡Ayúdame a entender tus enseñanzas maravillosas!» Salmo 119:18 TLA
Deseo que Dios ilumine tu mente y tu corazón para poder captar la belleza de esta vida que fluye a través de su Palabra.
Que con la ayuda del Espíritu Santo, puedas ver la riqueza espiritual de sus mandamientos; porque las enseñanzas que el Señor te da son preciosas y te nutren para alcanzar los propósitos de Dios.
¿Por qué nos conviene entender la Palabra de Dios?
Porque la vida plena y abundante sólo la podemos alcanzar cuando seguimos paso a paso las instrucciones que tiene la Palabra de Dios.
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Pido a Dios que aumente tu sabiduría cada día, tu amiga,
Lidia E. Cames
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