Nada te faltará

Tienes aquí una promesa de provisión: Nada te faltará. Y es una gran verdad que te llena de confianza cuando hay pendientes que pagar, cosas que comprar o cuando hay una aflicción o preocupación.

Sólo que a veces se tarda la provisión, ¿te ha pasado? O tal vez no llega la provisión cuando tú quieres y por más que la buscas no la encuentras.

Nuestra naturaleza nos lleva a sentirnos nerviosas porque las circunstancias nos dicen que habrán problemas.

Sin embargo, hemos de hacer un gran esfuerzo para no caer en pánico, sino de voltear al cielo donde está nuestro proveedor.

Para esto es necesario tener el panorama completo para comprender la forma adecuada para ver realizada esta promesa en nuestra vida.

Y ahora es cuando Dios quiere que veamos la primera parte del texto: 

EL SEÑOR ES MI PASTOR, NADA ME FALTARÁ

¿Sabes qué significa esto?

Un pastor de ovejas lleva a su rebaño a donde él cree que ellas van a estar mejor.

Ellas no pueden decidir por su cuenta su destino. Cuando lo hacen así, son atacadas por el lobo, o quedan atrapadas en lugares peligrosos. 

Así que, si el Señor es tu pastor, escucha su voz y camina por donde Él te dirige.

Sigue sus instrucciones y no tomes decisiones diferentes a su voluntad. 

No te desvíes del camino y no te pongas en peligro.

Espera en Él, deposítale toda tu confianza.

Cree que te dará lo que necesites, en el momento justo. Sólo así podrás llegar a experimentar la plenitud de lo que quiere decir «nada me faltará».

La clave para recibir la provisión en el momento oportuno es la confianza. Echa fuera toda duda o cualquier rasgo de incredulidad que te esté atacando y elige confiar en el Señor que tiene cuidado de ti y de tu familia.

También te gustará leer: 10 promesas para aprender a confiar en Dios

Querida cazadora de promesas, si este mensaje ha tocado tu corazón, compártelo en tus redes sociales con los botones en color rosa que están al final del post. Si deseas recibir los mensajes en tu correo, deja tus datos en el botón «Suscribirse».

Deseo que Dios sea tu proveedor oportuno, tu amiga,

Lidia E. Cames

Síguenos en Instagram: @arcoirisdepromesas